Los parches y compresas oculares cumplen dos tareas simultáneas en el tratamiento de las lesiones del ojo externo y los cuidados postoperatorios: protección y fijación. Por un lado, al cubrir el ojo se reduce el riesgo de infección, y por otro lado, los apósitos ayudan a inmovilizar el ojo. Se limitan los movimientos oculares y se minimizan las irritaciones y las lesiones causadas al frotarse los ojos.
Además de los materiales clásicos para vendajes oculares simples, oclusivos o con pomada, la gama MASTER•AID® también incluye vendajes con copa transparente, con copa de plástico cerrada o perforada. Estos apósitos especiales se utilizan cuando se desea proteger el ojo tanto de la penetración de cuerpos extraños y patógenos, como también contra el efecto de la presión. El diseño con copa cerrada también evita que el ojo se seque si el párpado no está cerrado o no se cierra completamente.
Thomas Kramer
Director de producto
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